Hace unos años, la Universidad de Harvard publicó un estudio en su revista en el que mostraba cómo las personas que tienen más información suelen tomar mejores decisiones.
Pero con un matiz importante.
Quienes tomaron las mejores decisiones no fueron las personas que tenían más información procedente de fuentes diferentes.
Los que más acertaron en sus elecciones fueron los que tenían toda la información en la misma fuente.
En el estudio se ponía a cada individuo frente a un ordenador y se le daban instrucciones para comprar por internet diversos productos electrónicos.
Algunos tenían que evaluar cada opción una por una, cerrando la ventana de su navegador una vez vista.
Otros tenían todas las opciones abiertas a la vez en varias pestañas del navegador.
Vamos, como cualquiera de nosotros, que tenemos 3418 pestañas abiertas al mismo tiempo.
¿Quiénes eligieron mejor?
Los segundos, los que tenían la información de todos los productos disponible en el mismo lugar.